:: TODOS ::
Playmobil: La película
Playmobil: The Movie
Director: Lino DiSalvo. Guion: Blaise Hemingway, Greg Erb, Jason Oremland. 99 min. Animación.
Marla es una adolescente a punto de entrar en la universidad, pero antes quiere viajar y conocer mundo, aunque sus padres no lo saben. Solo Charlie, su hermano pequeño, está al corriente del secreto. De hecho, los dos suelen dar rienda suelta a la imaginación, explorando mundos a través de sus playmobil. Pero un accidente de coche trunca todos los planes de Marla.
La película –mayormente dirigida al público infantil– es simpática y divertida. La historia está bien llevada y, aunque alguno de los números musicales dejan mucho que desear –especialmente el de Nerón–, se sigue bien. Y tiene fuerza porque, como si se tratara de una revisión de Cuento de Navidad, de Dickens, la magia lleva a los protagonistas a salir de uno mismo para darse a los demás.
:: JÓVENES ::
La luz de mi vida
Light of My Life
Director y guionista: Casey Affleck. Intérpretes: Anna Pniowsky, Casey Affleck, Elisabeth Moss, Hrothgar Mathews, Jesse James Pierce, Lloyd Cunningham, Monk Serrell Freed, Timothy Webber, Tom Bower, Tommy Clarke. 119 min.
La luz de mi vida es otra vuelta de tuerca al género apocalíptico, tan recurrente desde el 11-S y el cambio de milenio. Casey Affleck reconoce que ha hecho una película desde su punto de vista de padre de dos hijos adolescentes, preocupado por el mundo que vamos a dejar a esa generación. La historia que cuenta la película recuerda a dos obras maestras recientes: Hijos de los hombres, de Alfonso Cuarón (2006), y La carretera, de John Hillcoat (2019). En este caso, padre e hija sobreviven en un viaje interminable, en un mundo en el que todo es sospecha y carencia.
Casey Affleck sorprende por la personalidad con la que ha contado una historia íntima tan centrada en la relación filial. El guion tiene aspectos discutibles, como la larga escena inicial. También hay algunas reiteraciones en el viaje y el descubrimiento de las casas abandonadas. Aun así, la película es más que notable en casi todo lo demás; tiene una música minimalista muy acertada de Daniel Hart (A Ghost Story) y un secundario magnífico, apenas esbozado e interpretado por Elisabeth Moss.
Padre no hay más que uno
Director: Santiago Segura. Guion: Marta González de la Vega, Santiago Segura. Intérpretes: Anabel Alonso, Carlo D’Ursi, Daniela Blume, Fernando Gil, Leo Harlem, Marta González de la Vega, Pepa Charro, Santiago Segura, Sílvia Abril, Sirena Segura, Toni Acosta. 95 min. Lenguaje soez.
Hace dos años, Diego Peretti protagonizaba una comedia argentina titulada Mamá se fue de viaje que contaba, como su nombre anuncia, las desventuras de un padre de familia numerosa cuando se queda solo, sin la ayuda de su mujer. Dos años más tarde, y con apenas unos meses de diferencia, se han estrenado dos remakes: uno italiano, Diez días sin mamá, y este, español.
Surge la duda si es necesario tener tres películas idénticas en el plazo de menos de dos años. En el caso que nos ocupa, la cinta, a pesar de contar con el gancho del mediático Santiago Segura, no acierta nunca a despegar. El argumento tiene su chispa, pero el desarrollo resulta mucho menos divertido y fresco de lo que nos prometíamos. La película, probablemente sin quererlo, tiende más a la dramedia que a la comedia, y al final, queda varios escalones por debajo de la versión italiana, más entretenida y menos políticamente correcta.
:: JÓVENES-ADULTOS ::
Érase una vez en… Hollywood
Once Upon a Time in Hollywood
Director y guionista: Quentin Tarantino. Intérpretes: Al Pacino, Brad Pitt, Bruce Dern, Leonardo DiCaprio, Margot Robbie. 165 min. Lenguaje soez, sensualidad.
Érase una vez en… Hollywood no es ni de lejos de las mejores películas de Tarantino. En esta ocasión, la trama se centra en el Hollywood de finales de los sesenta y está protagonizada por Leonardo DiCaprio y Brad Pitt, que encarnan, en formato buddy movie, a un actor de westerns televisivos y a su doble y mejor amigo.
Durante más de dos horas y media asistimos a una recreación perfecta de la época, a toda una lección de historia audiovisual. Esa torrencial lluvia de referencias será un divertimento seguro para los cinéfilos y sin duda también para los que eran jóvenes en los 70; pero aportará poco o nada al público general. Esto no hubiera sido un problema de haber tenido una buena historia entre manos, pero –y este es el mayor problema de la cinta– la trama es sorprendentemente lineal y plana: le falta el ingenio que el director ha derrochado en otras ocasiones.