En el año 2001, Simon Carr, un comentarista político británico, publicaba The Boys Are Back in Town, una autobiografía en la que contaba la muerte de su mujer y la difícil tarea de educar a sus dos hijos.
El australiano Scott Hicks (Shine, Corazones en Atlántida) ha sido el encargado de llevar las vivencias de Carr a la pantalla grande. El guión de Allan Cubitt, un veterano escritor de televisión, modifica un poco la profesión del protagonista. Simon Carr es, en la película, Joe Warr, un famoso cronista deportivo divorciado y padre de dos hijos de 7 y 14 años de edad.
Después de la repentina muerte de su segunda mujer, Warr tendrá que afrontar el reto de llevar un hogar en el que solo hay hombres. Al principio, Warr decidirá tomar como máxi…
Contenido para suscriptores
Suscríbete a Aceprensa o inicia sesión para continuar leyendo el artículo.
Léelo accediendo durante 15 días gratis a Aceprensa.