El popular actor alemán produce, dirige y coescribe esta comedia romántica sobre un periodista telebasurero condenado a 300 horas de trabajo social en una guardería dirigida por una mujer que fue compañera suya de colegio.
La idea es buena pero el guión es zafio y grosero hasta decir basta, tanto que queda casi neutralizado el empeño por lograr una historia de amor novedosa, con el telón de fondo satírico que retrata a parte de la sociedad alemana enloquecida con el sexo y los programas de cotilleos. Fue la película más taquillera del año 2007 en Alemania, con unos impresionantes 74 millones de dólares de recaudación, por encima de Harry Potter y la Orden del Fénix, Piratas del Caribe: En el fin del mundo y Ratatouille.