Anagrama. Barcelona (2002). 268 págs. 13,99 €. Traducción: Sergi Pàmies.
Primera novela de Frédéric Beigdeber, quien la inició cuando fue despedido de la importante agencia de publicidad Young & Rubicam. Sátira del ascenso y la decadencia de un creativo publicitario a través del diseño, filmación y presentación en Cannes de un anuncio de queso desgrasado «Delgadín». Historia de sexo, drogas y éxito profesional -no siempre por este orden- en la que se denuncian los letales mecanismos de la publicidad. La incitación al consumo es presentada como la vanguardia de choque del nuevo totalitarismo planetario: el capitalismo multinacional.
13,99 euros podría haber sido un ensayo o un panfleto, tal vez un romántico «Discurso a los esclavos de Consumilandia», pero el autor prefirió redactarla en forma de novela. Con un lenguaje tres veces salaz, Beigbeder edifica al lector por el procedimiento de ahitarle de situaciones lamentables. Moraliza por saturación de frívola perversidad. Parte del éxito de esta novela, sobre todo en Francia, se debe a su sintonía ideológica con los movimientos antiglobalización y a la estética gore que impregna todo su relato.
Rafael Díaz Riera
