Amigos y héroes es la novela con la que la escritora británica Olivia Manning (1908-1980) cierra la llamada Trilogía balcánica, de la que forman parte La gran fortuna y La ciudad expoliada, las tres protagonizadas por el matrimonio Pringle.
En la narración, Harriet ha huido de la Rumanía ocupada por los nazis para refugiarse en Atenas, mientras Guy sigue en Bucarest a la espera de desplazarse a Grecia y reencontrarse con su esposa. Por el momento, aunque hay carestía de víveres, reina cierta tranquilidad, a pesar de la posibilidad de que Italia decida invadir el país.
Manning centra la atención en la relación afectiva del matrimonio, casi siempre compleja. Guy dedica sus energías a montar una revista teatral, pues es una persona activa y se enfrasca en tareas al margen de Harriet. Se ocupa de todo menos de ella, y Harriet, que sigue creyendo en el amor, encuentra un amigo que la entiende.
Hacia el final de la novela, en una declaración que atribuye a Guy, la autora resume a la perfección los sentimientos que embargan a todos y sintetiza lo que cuenta la trama: “Habían salido de Grecia como exiliados. Habían cruzado el Mediterráneo y, en ese momento, en la otra orilla, sabían que eran refugiados. De todos modos, estaban vivos: una suerte un tanto mermada, pero una suerte, al fin y al cabo. Y estaban juntos y así seguirían, era la única certeza que les quedaba”.
Oliva Manning tiene la habilidad de enhebrar hábilmente el relato bélico con la problemática relación de los Pringle, de modo que la obra se puede leer desde dos ángulos: desde el que ofrece la perspectiva de la vida diaria de una pareja, o con un enfoque histórico. El resultado es una narración muy interesante, excelente, tanto desde el punto de vista conceptual como desde el literario, ya que enlaza acontecimientos relevantes con los gestos, las palabras y los detalles que configuran la existencia. A todo ello hay que sumar los personajes, muy bien retratados, que intentan afrontar como pueden la situación que les ha tocado vivir.
La Trilogía balcánica está considerada como un clásico imprescindible sobre la Europa de la Segunda Guerra Mundial. Curiosamente, en su momento, Manning pasó inadvertida y solo se ha comenzado a valorar su talento tras su muerte.