Ediciones B. Barcelona (2001). 378 págs. 19,50 €. Traducción: Mercè Diago y Abel Debritto.
David Baldacci es un autor de thrillers legales al modo de John Grisham. Y, como hizo el autor norteamericano en La Granja (ver servicio 69/01), quiere sorprender a sus seguidores con una historia de niños ambientada en los años 40 en las montañas de Virginia. Después de un accidente de coche en el que fallece su padre y su madre queda en coma, los dos hermanos Cardinal dejan Nueva York y se van a vivir a la granja de su enérgica bisabuela Louisa, donde no hay ni teléfono, ni luz, ni agua corriente.
Baldacci desarrolla con calma su argumento, describe con detalle ambientes y personajes, en especial a la futura escritora Lou, de 13 años, y al tímido y sensible Oz, de 8, y va preparando el terreno para un emotivo juicio de los Cardinal contra una compañía minera que desea sus tierras. Si alguien espera encontrar personajes y escenas tópicas, o intenta predecir cómo se anudarán los hilos de la historia, no necesitará ser un genio para obtener un ciento por ciento de aciertos. Por otra parte, Baldacci es un buen narrador, los únicos reclamos comerciales que usa son buenos sentimientos y el correspondiente subidón emocional del desenlace, y no engaña respecto a sus intenciones de hacer de Buena suerte una futura película con éxito entre todos los públicos.
Luis Daniel González