Encuentro. Madrid (2002). 361 págs. 16,64 €.
Con sus últimos ensayos, Pío Moa se ha convertido en una voz autorizada y original en el panorama bibliográfico sobre la historia reciente de España. Ediciones Encuentro ha publicado su trilogía sobre la Segunda República y la Guerra Civil: Los orígenes de la Guerra civil española (1999); Los personajes de la República vistos por ellos mismos (2000); El derrumbe de la República y la Guerra Civil (2001). Y ha causado impresión, por su independencia, que rompe con el juego de sobreentendidos y malentendidos a que nos tienen acostumbrados las operaciones ideológicas que reconstruyen el pasado para servir a los intereses del presente. Pío Moa, antiguo revolucionario y hoy escritor y ensayista, sabe escoger el material y tiene talento de narrador, con lo que consigue una intensidad que hace apasionante la lectura.
Este es el libro más personal de todos, porque narra su experiencia como miembro activo de un grupo revolucionario: la Organización de Marxistas Leninistas Españoles, uno de los grupúsculos de extrema izquierda, que dio lugar al GRAPO. Con la fuerza de lo que se ha vivido en primera persona, presenta esa curiosa mezcla de mística revolucionaria, pastiche ideológico y humanidad, a la vez épica y sórdida, que se daba en estos grupos. Cuenta su incorporación, los trabajos de propaganda y concienciación, los esfuerzos para ganar adeptos y movilizarlos, los intentos de estructuración, los análisis, autocríticas y discusiones interiores; las huidas y persecuciones, las bajas. Y la deriva general a medida que los ideales se convertían en lejanas quimeras y se embarraban en una acción violenta y sin sentido.
Pío Moa dejó el Grupo por discrepancias ideológicas y escribió sus recuerdos entre 1979 y 1981, publicándolos en una pequeña editorial (De la Torre). Tras el éxito de la trilogía, vuelven a ser publicados y oportunamente. Moa pinta admirablemente los caracteres y da el contexto que permite situarse dentro de la mentalidad de estos que también fueron protagonistas en la transición, mostrando la génesis y los intentos de justificación de la violencia. Un papel que, con la perspectiva actual, Pío Moa juzga equivocado, pero que sabe hacer entender en su libro. Así, sin pretenderlo, el libro es un testimonio indispensable para conocer la historia inmediata; y, como toda verdadera historia, unas veces positiva y otras negativamente, también un testimonio de humanidad.
Evaristo Menéndez