Se rescata otra historia del comisario Montalbano que no llegó a publicar en vida Andrea Camilleri (1925-2019). En esta ocasión, se basa en un guion, escrito hace más de diez años, que preparó para una película que iba a ser una coproducción italoestadounidense, pero que al final no se llegó a realizar. Este origen influye algo en el ritmo y desarrollo de la novela, y también en algunos ingredientes, quizás más peliculeros de lo habitual.
Vuelve Camilleri a utilizar los personajes y las ambientaciones ya conocidas: la trama transcurre en Vigàta y el detonante es la aparición de un muerto en una fábrica de cascos de barco. La actitud de su propietario, el empresario Giovanni Trincanato, levanta sospechas y da pie a las primeras investigaciones. Poco a poco, Montalbano empieza a descubrir que quizás todo esto sea una tapadera de algo mucho más peligroso.
La aparición del impresionante velero Alcyon en la costa centra los trabajos de Montalbano y sus ayudantes. Lo que pueda suceder dentro del velero ha despertado también el interés de la policía norteamericana, que investiga a algunos de los posibles pasajeros. Todos corren muchos peligros (Montalbano se hace pasar por cocinero en el velero) y la resolución del caso se desata principalmente en una de estas travesías.
Antes, para despistar en el desarrollo de las pesquisas, ocurren bastantes sucesos inesperados, cambios de imagen de los personajes y hasta de destino de algunos de ellos, como el propio Montalbano, medidas sorprendentes que desconciertan a los lectores y, también, a los propios protagonistas.
Montalbano comparte los detalles de su investigación con los policías Fazio y Augello. También se describe la vida en la comisaría, con la presencia habitual de Catarella, y las tensas relaciones, a veces, con los periodistas de la televisión local, y las comidas en el restaurante de Enzo, al que suele acudir Montalbano. La novela muestra la habilidad de Camilleri para construir historias con intriga ambientadas en su Sicilia natal.