Península. Barcelona (1997). 158 págs. 1.900 ptas. Traducción: Ana Poljak.
La primera novela de Mario Pasa (1964), escritor veneciano y a la vez parisino, está estructurada en siete cajones en los que se narran siete historias distintas. El hilo conductor de todas ellas es El Escritorio de las Maravillas, una valiosísima pieza de ébano y marfil grabado con tinta que un monje romano hace llegar a un joven que viaja a un país lejano. El mueble tiene siete cajones y en cada uno de ellos puede contemplarse la imagen de una ciudad. El primer cajón contiene los datos que sirven de referencia para comprender el resto de la obra. Sobre esta escribanía realizada en 1650, el monje ha ido anotando las vivencias de sus numerosos viajes por Europa. Durante siglos se han guardado en cada uno de los siete cajones las confidencias de sus distintos propietarios, y quedan sellados para siempre al invertir sus rótulos. A todas estas historias polifónicas tiene acceso el lector, quien va descubriendo sorprendentes y misteriosas pesadillas a medida que avanza su lectura.
Además de la estructura, el tratamiento novelístico -en la línea de la novela gótica- y los personajes que aparecen por estas páginas están repletos de originalidad. Un libro insólito y ameno.
Begoña Mardones