Luis Sepúlveda (Chile, 1949) debutó en 1993 con Un viejo que leía novelas de amor, novela que cosechó un gran éxito. Tras un recorrido en el que ha combinado diferentes géneros, regresa a sus raíces con El fin de la historia, con una trama negra y de espionaje en torno a la dictadura de Pinochet que enhebra acontecimientos relacionados con la Rusia de Trotski o la Alemania nazi.
Sepúlveda alterna diversas épocas y planos geográficos e históricos para construir un mosaico de conexiones socio-políticas que engarza en una novela de aventuras contada con ritmo implacable. Está basada en un hecho real, ya que en 2005 llegó a Chile una delegación de cosacos con la pretensión de conseguir la libertad del asesino Miguel Krassonf, un auténtico atamá…
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