Dèria. Barcelona (1999). 190 págs. 1.950 ptas. Traducción: Luia Fernanda Garrido y Tihomir Pistelek.
Miljenko Jergovic (Sarajevo, 1966) es un corresponsal y columnista bosniocroata que ha comenzado su carrera literaria publicando artículos en diversas revistas de su ciudad natal y en la actualidad tiene publicados varios libros de poesía, narrativa y ensayo. Este conjunto de relatos ha sido traducido a ocho lenguas. Además, cuenta con el prólogo del conocido escritor y estudioso Claudio Magris, que es una buena tarjeta de presentación.
El jardinero de Sarajevo contiene veintinueve relatos enmarcados en la guerra civil de Bosnia-Herzegovina y casi todos ellos en el sitio de Sarajevo. La crueldad de la guerra está continuamente presente sobre sus personajes, que suelen ser gente muy normal, quizá endurecida por la dramática situación que padecen. Los relatos dejan ver en la mayor parte de los casos sus mejores sentimientos y valores ante hechos nimios -la fruta que crece en un árbol del jardín- o situaciones dramáticas como la decisión valiente de enfrentarse al jefe de una milicia de chetniks.
Despedidas familiares ante el exilio; llamas de destrucción para responder a los anónimos cañonazos venidos del monte; cartas llenas de controlada ternura que viajan hasta aquellos seres queridos premiados por la suerte de la libertad exterior… Hay historias que conmueven, a veces aleccionadoras, otras rebosantes de emoción; hay patetismo y gentes muy buenas, personas limpias… Todo evocado por alguien que lo ha vivido, con sobriedad, poesía y amor por la vida. Miljenko Jergovic, partiendo de las calamidades de una guerra, ha fabricado un conjunto de buenos relatos que contienen mucho de poesía épica.
Ángel García Prieto