Ya en su primer libro, El heredero, Rafael Tarradas Bultó (Barcelona, 1977) demostró sus buenas cualidades con una amena novela ambientada en torno a la Guerra Civil española. El valle de los arcángeles es una obra más compleja y más elaborada, que comienza en Barcelona, pero pronto la acción se traslada a Cuba, donde entre los esclavos crecen impulsos de rebelarse.
Los protagonistas son Gabriel Gorchs, hijo único del barón de Santa Ponsa, quien en 1864 hereda una importante hacienda azucarera en la isla, y una mujer, Isabel Palau, que demuestra no tener ninguna consideración para medrar y hacerse con más poder. Los dos son nuevos en la isla y los dos vincularán sus destinos a las haciendas azucareras en unos años de plena agitación social y política.
El autor ambienta la novela en lo que él llama “Valle de los Arcángeles”, donde se localizan tres grandes haciendas: San Gabriel, San Rafael y San Miguel. Gabriel Gorchs se hace cargo de San Gabriel e Isabel Palau acaba contrayendo matrimonio con el dueño de la hacienda San Rafael. Otro interesante personaje, que también viaja desde Barcelona a Cuba, es Alicia, la tía del propietario de la hacienda de San Miguel.
Tarradas consigue construir unos eficaces personajes representativos de la cultura colonial, aunque quizás cargue un poco la mano en las oscuras intenciones de Isabel, dispuesta a sembrar odio por donde pasa, también entre los compatriotas que trabajan y dirigen las haciendas cubanas. Junto con los problemas entre los propietarios, la novela describe el negocio que mueve el mercado de esclavos en Cuba.
El valle de los arcángeles es una novela de aventuras y acción, con sus ingredientes también costumbristas y psicológicos. Todo está muy bien contado y el autor demuestra un excelente dominio de los recursos para enganchar a los lectores en una trama en la que se mezclan los conflictos humanos y políticos.