Seix Barral. Barcelona (2006). 224 págs. 15 €. Traducción: Guadalupe Ramírez.
Susanna Tamaro consiguió con «Donde el corazón te lleve» (ver Aceprensa 146/94), publicada en 1993, un arrollador éxito en todo el mundo, con más de trece millones de ejemplares vendidos. Sin embargo, Tamaro sufrió los envites de la crítica, que castigó duramente el mensaje de esta novela, muy crítico con los herederos ideológicos del post-mayo del 68. Lo mismo le sucedió con sus siguientes novelas.
«Escucha mi voz» es la continuación de «Donde el corazón te lleve», que sigue siendo la mejor novela de la autora. Aparecen los mismos personajes, aunque ahora se aborda el mismo conflicto desde otro punto de vista, el de Marta, la nieta. Marta vuelve a casa de su abuela tras pasar unos años en América. El reencuentro no resulta sencillo y su convivencia está llena de tensión. El carácter de la protagonista y la salud de la abuela crean una brecha profunda entre ambas. A pesar de las circunstancias, Marta descubre que su abuela aún guarda en el desván recuerdos de su hija, la madre de la protagonista. Entre otras cosas, además de un diario y unas cartas, el bolso que su madre llevaba momentos antes de morir. En él hay una carta de su padre. Desde ese momento los grandes ausentes de la vida de Marta, sus padres, se presentan ante ella. Marta comienza así a analizar sus raíces, un proceso doloroso pero purificador.
El libro no defraudará a los que han leído «Donde el corazón te lleve», a pesar de que no tiene tanta fuerza. Tamaro recupera con acierto los personajes del libro anterior y los completa al dotarles de voz. Además, cuenta la parte de historia que había quedado oculta. Los personajes ponen de manifiesto numerosas contradicciones vitales que, en muchos casos, terminan por dar lugar a la esperanza, la ilusión, la gratitud y la fe. Esto hace que el libro comience con la dureza típica de «Respóndeme» (ver Aceprensa 21/02) o «Fuera» (ver Aceprensa 44/04) y finalice con el tono amable e intimista de «Donde el corazón te lleve».
El estilo de Tamaro nunca ha sido espectacular, pero sus libros siempre han sido valientes en cuanto al contenido. En «Escucha mi voz», Tamaro reflexiona sobre realidades tan actuales como el individualismo, la libertad, el feminismo, el aborto, la familia, la religión, etc. La autora afronta estos temas espinosos con una crítica mordaz, pero constructiva y sincera, que siempre tiene un lugar para la esperanza.
José María Fernández Fuentes