Disculpen el destripe. Este libro termina con la siguiente nota: “Como ya habrán notado, Cómo ser un autor público es una obra de ficción. Francis Plug no ve ni refleja el mundo real: él habita un plano muy distinto”. Cuando el lector se topa con esa nota lleva casi cuatrocientas páginas siguiendo las andanzas de un simpático jardinero borrachuzo obsesionado con dos objetivos: conseguir el autógrafo de todos los ganadores vivos del premio Booker y escribir un libro sobre su experiencia para los que, como él mismo, aspiran a ser escritores.
Por el camino hemos acompañado al señor Plug (¿cómo lo podemos definir?: es un fumador y bebedor empedernido, una especie de comunista extemporáneo, un demente que habita la más absoluta precariedad) a lo…
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