Flavia Company (Buenos Aires, 1963) es autora de más de una docena de libros, entre poesía y narrativa, y su obra ha sido traducida a varios idiomas. Es profesora de microrrelatos en la Escuela de Escritura del Ateneo Barcelonés y de cuento en el Máster de Creación Literaria de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona.
La novela se desarrolla en Japón en una época indefinida. La protagonista es Haru, una chica que, al principio de la novela, tiene quince años y acaba de perder a su madre. Antes de fallecer, le comunicó que debía entrar en un dojo que es una escuela de tiro con arco, pero también un centro de enseñanza japonés donde se aprenden además otras disciplinas, como la caligrafía. Durante los años que dura su estancia en el centro, Haru irá completando su formación, junto a otros siete compañeros.
De espíritu crítico y un tanto rebelde, al acabar sus estudios, no quiere volver a su casa con su padre. No le ha perdonado que la hubiera obligado a ir al dojo, cumpliendo la última voluntad de la madre. Se instala en la ciudad, donde mendiga hasta que la acoge en su casa un maestro zapatero que continúa con la formación de la protagonista. Ávida de nuevas experiencias, abandona al maestro zapatero y se instala en un mundo de riquezas, lujos y corrupción, que la alejan de la voluntad de su madre y de las enseñanzas del dojo. La muerte del maestro zapatero le hace reflexionar y decide emprender el camino de regreso a su casa para reconciliarse con su padre. El camino, que realiza a pie, le hace ir meditando y reflexionando, y acabará por entender todas las enseñanzas recibidas.
La historia de Haru transcurre en un viaje lineal hacia el futuro, con algún breve paréntesis, en los que en una visión la protagonista ve a la autora. Está escrita de forma amena, con el uso de frecuentes sentencias: “La verdad llega cuando uno se queda quieto para que lo encuentre”, “Cuando muere un pájaro, cambia el movimiento del aire para siempre”.
Estamos ante una buena novela que nos habla del esfuerzo, la disciplina y el trabajo, constantes en la vida de la protagonista; así como de la duda, el desaliento, la caída y la recuperación que llega con el perdón y el arrepentimiento.