Siruela. Madrid (2003). 210 págs. 18,50 €. Traducción: Juan de Sola Llovet y Juan José del Solar.
Son ochenta y cinco las historias de amor que Robert Walser cuenta en sólo 210 páginas; es que son brevísimas; las más largas, y de estas hay pocas, abarcan dos páginas o tres.
Walser murió el día de Navidad de 1956. Historias de amor no se publicó hasta 1978, para conmemorar el centenario de su nacimiento. En esta edición no se señala la cronología de estos relatos, cosa que vendría muy bien conocer, dada la peculiar personalidad del autor, y su también peculiar relación con las mujeres, su soltería de algún modo involuntaria, su rara concepción del amor en el matrimonio… Walser fue ingresado temporalmente en un manicomio a sus 50 años; y parece que definitivamente cinco años después, hasta su muerte a los 78. Sí, tendría mucho sentido conocer la cronología de sus relatos de amor.
Hace dos años comenté en estas páginas su libro El ayudante (ver servicio 94/01), que es una maravilla tanto por el mundo interior que expresa como por la misma expresión literaria. Esta vez no me ha parecido una maravilla la expresión literaria de Historias de amor, y lo son las obras que conozco, cortas: La rosa (ver servicio 59/98), y El paseo (ver servicio 165/96), o largas, además de la citada: Jakob von Gunten y Los hermanos Tanner.
Quizá sea debido a que no es una obra de Walser, sino una composición del autor del epílogo, Volker Michels, con relatos sueltos sin voluntad (la del autor, que es la de la obra) de formar unidad. Estas Historias de amor son comentarios de lecturas, son impresiones vividas, observadas, inventadas , son apuntes que nacen y, de hecho, han muerto como apuntes. Y al contenido, por decirlo así, no lo calificaría ni de muy gracioso ni de muy agudo ni de muy profundo. Cositas tan breves o deberían estar trabajadas como poemas, o hacerlas crecer como verdaderos relatos, o novelas breves. Tal vez no se le hizo un gran favor a este gran escritor con este libro-centenario, que él no ha escrito.
Pedro Antonio Urbina