Talasa Ediciones. Madrid (1999). 199 págs. 1.775 ptas.
El tema de la deuda externa presenta una gran complejidad, precisamente porque en él se entremezclan aspectos de la más pura teoría económica y las finanzas internacionales junto a cuestiones del subdesarrollo y la cooperación internacional. Por eso mismo, los actores o instituciones que tienen algo que decir al respecto son también muy variados: los gobiernos -deudores o acreedores-, las organizaciones financieras internacionales -Fondo Monetario Internacional, Banco Mundial,…-, los bancos y prestamistas privados, y todo el sistema de ONG y demás movimientos sociales, que en todo el mundo trabajan por el desarrollo de las sociedades más pobres. Este libro puede servir para dotar de mayor contenido teórico y solidez a las propuestas de condonación de la deuda, que a veces se hacen con más buena voluntad que conocimiento.
Comienza por describir cuáles han sido las políticas oficiales de gestión de la deuda desde que en los años 80 estalló la crisis por la imposibilidad de muchos de los países del Sur de cubrir los pagos, y constata el fracaso de todas ellas y el agravamiento del problema. A continuación estudia con amplio detenimiento la última y actualmente en vigor de estas iniciativas: la ofrecida por el FMI y el Banco Mundial a los llamados Países Pobres Altamente Endeudados. Este marco comprende unas estrategias, por primera vez amplias y con perspectiva global, de reducción de la deuda (cfr. servicios 95 y 142/99).
A pesar de todo, el análisis crítico que de esta iniciativa presenta este libro -sobre la base de informes de ONG- concluye con una opinión negativa. Se propone, en cambio, ligar muy directamente el alivio de la deuda de los países más pobres con la inversión directa en su desarrollo sostenible, así como facilitar la participación de la sociedad civil en el diseño y seguimiento del proceso de anulación de la deuda.
Otra aportación muy interesante del libro es el estudio de las políticas del gobierno español con respecto a la deuda externa, realizado por Jaime Atienza, uno de los mayores especialistas en el tema.
Una de las grandes virtudes del libro es que, además de aportar una crítica rigurosa y documentada de las políticas oficiales sobre la deuda externa, ofrece alternativas reales y propuestas factibles para su condonación. Estas propuestas provienen de instituciones muy variadas, del Sur y del Norte, con puntos de partida e ideologías muy distintas.
Cierra el libro un completo diccionario en el que se explica de forma precisa la mayoría de conceptos que, a veces incorrectamente, se vienen manejando en este asunto.
Enrique Abad Martínez