BAC. Madrid (2004). 105 págs. 8,50 €. Traducción: Santiago García Díez.
Jacques Arnould es un dominico doctor en Historia de la Ciencia y en Teología. Especialista en el diálogo entre ciencia, cultura y religión, ha publicado diversos trabajos en este campo. En este libro trata la relación entre la Iglesia y la reflexión científica acerca de la evolución de los vivientes, sobre todo la evolución humana.
Escrito desde una óptica cristiana, el libro aborda objetivamente las insuficiencias de ciertos planteamientos refractarios a toda forma de evolucionismo, así como el marco en el que se puede dar hoy un diálogo entre fe cristiana y la ciencia sobre la evolución humana.
Arnauld analiza los pasos que llevaron a la revolución darwiniana, y aborda el debate que suscitó la publicación de «El origen de las especies», así como la asunción de la idea de la evolución por parte de pensadores cristianos. El penúltimo capítulo trata sobre la polémica norteamericana entre evolucionistas y «creacionistas científicos».
Frente al evolucionismo radical antifinalista que sostiene que en la naturaleza no hay diseño alguno, el autor trae a colación la opinión de biólogos «disidentes», que, desde posturas no cristianas, afirman que en la naturaleza sí hay una finalidad intrínseca que excluye el azar y da la impresión irresistible de responder a un designio.
Carlos A. Marmelada