Fue la obra de Foucault quien puso de moda la biopolítica y desde entonces otros autores –desde G. Agamben hasta R. Esposito– han intentado profundizar sobre esa transformación del poder político, que en lugar de decidir sobre la muerte, ha pasado a gestionar la vida. Pero resulta arriesgado continuar el camino abierto por un pensador que decretó la muerte del hombre y que es, por tanto, uno de las fuentes inspiradoras del antihumanismo contemporáneo.
Possenti, miembro del Comité Nacional de Bioética de Italia y de dos Academias Pontificias, conoce bien la filosofía contemporánea y sitúa esa deshumanización en la concurrencia de diversas corrientes ideológicas que tienen en común su interés por la técnica y su visión materialista. Possenti …
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