Tusquets. Barcelona (1995). 335 págs. 2.300 ptas.
Aunque Grossman (Jerusalén, 1954) alcanzó fama internacional con Véase: amor (ver servicio 67/93), su primera novela es La sonrisa del cordero. Publicada en su país en 1983, tiene como marco la situación de los territorios palestinos ocupados por Israel. En este clima de odios e incomunicación domina la mentira hasta tal punto que los cuatro protagonistas de la obra ven severamente limitada su libertad. Jamás podrán ser personas normales. El peso de un conflicto largo y cruel atenaza cada una de sus actitudes.
Grossman plasma los monólogos interiores y pensamientos de los personajes. Discursos sin cerrar, continuas vueltas a los mismos acontecimientos, el remordimiento y la duda, pueblan sus mentes. El ambiente externo no posee asideros en los que afianzar nada. Los personajes son pura confusión y búsqueda fracasada. Su drama, narrado con un estilo denso y difícil, muestra que la mentira generalizada lleva a la infelicidad..
José Félix Tamayo