Plaza y Janés. Barcelona (2003). 388 págs. 18 €. Traducción: Roser Berdagué.
Esta biografía autorizada se publicó en 1997, año de la muerte de la Madre Teresa. La versión en español aparece poco antes de su beatificación, con un capítulo añadido al original sobre la relación de Madre Teresa con España, en el que la autora ha contado con el auxilio de dos buenos conocedores de la religiosa, José Luis González-Balado y Mercedes Suárez-Guanes.
González-Balado es, a su vez, autor de una recopilación de palabras y testimonios de la religiosa albanesa (Madre Teresa de Calcuta. Mi vida por los pobres: ver reseña en servicio 2/93) que ahora se reedita. En opinión de uno de los principales colaboradores de la Madre, el hermano Andrew (1928-2000), cofundador de los Hermanos Misioneros de la Caridad, «es lo más parecido que acaso tengamos a una autobiografía».
Spink, colaboradora durante 13 años en los trabajos de la Madre Teresa y las Misioneras de la Caridad, contó con la autorización de la fundadora, a la que conoció en 1980, para escribir su biografía, en la que se ha servido de los testimonios de muchas personas que convivieron con la religiosa, así como de cartas escritas por ella. Se cierra el libro con un sucinto recorrido por el proceso de beatificación de Madre Teresa y su fama de santidad, y una relación cronológica de sus fundaciones fuera de la India.
Spink, nacida en el Himalaya indio en 1953, hija de padres misioneros, es autora de libros sobre Gandhi, el citado hermano Andrew y Juan Pablo II. El libro se asoma a la trayectoria de una contemplativa que sirvió a Jesús en los pobres, allá donde se encontrasen, haciéndose pobre por elección. Una mujer de extraordinaria humildad, apasionada en su fidelidad a la Iglesia y el Papa, que defendió la dignidad de la vida humana desde la concepción hasta la muerte, sin miedo al qué dirán, sin buscar el aplauso a cualquier precio. Quizás muchos, que sólo tienen la visión de la Madre Teresa como «trabajadora social», se sorprendan al descubrir en esta biografía las motivaciones sobrenaturales que siempre guiaron su dedicación a los pobres.
Alberto Fijo