Paola Drigo (1876-1938), hija de un noble garibaldino, tiene una obra literaria tardía, pues se dedicó sobre todo a cuidar de su familia. Sus primeros relatos son de 1913 (La fortuna) y de 1918 (Codino); también fue articulista bastante popular. En 1932 publica otra colección de relatos (La signorina Anna) y en 1936, las novelas Fine d’anno y Maria Zef. Se la suele considerar continuadora del verismo –así se llama el naturalismo en Italia– de Giovanni Verga, de Edmondo De Amicis…
Maria Zef es probablemente su obra más destacada; ha sido llevada al cine en dos ocasiones. Narra la vida dramática de tres mujeres en una zona montañosa muy inhóspita y deshabitada. La madre muere pronto y quedan sus dos hijas al cuidado de un hermano del padre, f…
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