Gracias a los movimientos de población de las últimas décadas, las sociedades modernas son, especialmente en el llamado mundo occidental, una mezcla de diferentes etnias, culturas y religiones. La cuestión es cómo afrontar estos cambios y construir una convivencia humana no solo pacífica, sino enriquecedora para todos. En este ensayo se examina en profundidad la propuesta del multiculturalismo, se ponen de manifiesto sus limitaciones, y se propone, como alternativa al mismo, la sociología relacional.
Donati, prestigioso sociólogo italiano, cree que el paradigma multicultural, heredero de la razón ilustrada, entraña un mal endémico: el aislamiento recíproco entre las comunidades que conviven en un mismo territorio. Las diferencias no son aceptadas, porque se las relega a la esfera privada. Lo mismo ocurre con los valores o los fines individuales, que se estiman fruto de una decisión arbitraria, sin justificación racional. Subyace, pues, en esta concepción una contraposición entre individuo y sociedad.
A día de hoy, sin embargo, hay un consenso entre sociólogos y filósofos sobre el fracaso de la razón y el modelo moderno. En este punto entra en juego el concepto de “dopomodernidad” acuñado por Donati (no “post”, explica, porque no renuncia a los valores ni a la verdad). Se trataría de una alternativa sanadora de la racionalidad moderna, vertebrada sobre la dimensión relacional, que, partiendo de la naturaleza social del ser humano, permite ampliar el marco de la razón e incluir los valores, los fines y las relaciones mismas. Lejos de relegar lo que no sabe explicar, este modelo permite apreciar positivamente las diferencias e incluso las estimula, buscando tender puentes entre culturas y contribuir al bien de la persona.
Las reflexiones de Donati se extienden especialmente a los ámbitos de la religión y la familia. Ambos fenómenos deberían revalorizarse socialmente y ser reconocidos, entendiendo el reconocimiento en su doble acepción de identificación y agradecimiento. En su propuesta, el sociólogo italiano también ofrece una reformulación del concepto de laicidad: anima a restituir el protagonismo a las comunidades, frente al poder estatal, y permitir el ejercicio libre y la defensa argumentada de las propias convicciones.
Más allá del multiculturalismo resume más de dos décadas de investigación. Posiblemente el principal logro de Donati sea haber formulado una teoría de la sociedad con una profunda raigambre filosófica y fundada sobre la persona, ya que parte de lo que caracteriza a esta: su apertura y capacidad para integrar al otro y enriquecerse en su convivencia con el prójimo. Elena Álvarez.