La vida en común está compuesta por pequeños detalles que lo llenan todo, lo que José María Contreras llama “secretos”. El autor parte de que la relación hombre-mujer no resulta fácil y explica que la convivencia seguirá siendo complicada si no pensamos en cómo mejorarla. Su propósito es, precisamente, hacernos pensar.
Explica así que compartir la vida es un proyecto con vocación de permanencia, por lo que es importante elegir bien, saber distinguir lo efímero y lo fundamental, y tener claro que quizá no seamos capaces de cambiar a la otra persona, pero sí podemos cambiar nosotros. Resulta fundamental entender que el amor no existe per se, hay que esforzarse, porque más que un sentimiento es un acto de voluntad.
Contreras también se adentra…
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