Eloy Tizón (Madrid, 1964) está acreditado como uno de los más relevantes cuentistas españoles contemporáneos. Diferente, no siempre fácil, con claro domino de los prodigios posibles del idioma, creador de atmósferas, imágenes y tiempos, con fragancias de lirismo, con una capacidad innovadora y de riesgo que busca aliarse con el lector, empezó demostrándolo con su primer libro, Velocidad de los jardines (1992). Y cada diez años, más o menos, ha dado un volumen reposado y maduro, artístico, de narrativa breve: Parpadeos (2006) y Técnicas de iluminación (2013), que acentuaron su personalidad de escritor, y ahora, más audaz todavía, Plegaria para pirómanos (2023). Ha intercalado entretanto tres novelas y una recopilación de trabajos, críticas y…
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