Alfaguara. Madrid (2000). 492 págs. 17,13 €.
En 1975, vecinos y amigos del barrio de Salamanca de Madrid esperan el fallecimiento de Franco. Entre la expectación y la posterior apertura política, los protagonistas de esta novela reflejan modas y costumbres de este sector acomodado de la ciudad.
La obra, ambientada en una zona muy concreta de Madrid, con sus reminiscencias burguesas, y centrada en tres generaciones de una misma familia, es una caricatura global de personajes, ideas, modos de hacer…, pero tan frívolamente tratados que no llega a ser la crítica mordaz que el autor parecía pretender. Para Longares, esta «burguesía improductiva» oculta una serie de engaños, pasiones e intereses que todo lo convierten en superficial, en el mejor de los casos. La frivolidad en cuestiones éticas hace que los personajes se muestren amorales. El clero queda sistemáticamente caricaturizado. El estilo, muy reiterativo, con vulgaridades, lleno de largas descripciones, lastra la lectura. Contra todo pronóstico, Romanticismo ha obtenido el último Premio de la Crítica.
Ángel Amador
