A los 35 años, Henry Preston Standish sufre una profunda crisis de identidad: cansado de la vida que lleva en Nueva York, decide hacer un paréntesis y emprender un largo viaje para reflexionar. Tiene un buen trabajo, una mujer, dos hijos y una vida exitosa y ejemplar. Pero necesita poner tierra de por medio. Tras un largo periplo que le lleva hasta Hawái, de manera un tanto impredecible aplaza el regreso y se embarca en el Arabella, un buque que hace la ruta Hawái-Panamá.
Ya a bordo, Standish, todo un caballero, se integra con el resto de los pasajeros y la tripulación. El viaje resulta un éxito y le sirve para ordenar su cabeza, así como para disfrutar de la paz y la tranquilidad que tanto anhelaba. Una noche, decide acostarse muy pronto y se despierta antes de lo esperado. Resuelve subir a cubierta, tomarse un café y disfrutar del amanecer desde el barco. Pero en un determinado momento, Standish se resbala con una mancha de grasa y cae en el mar. Nadie se da cuenta en el barco de su ausencia hasta pasadas muchas horas. Todos piensan que lo más seguro es que su desaparición se deba a un premeditado suicidio.
Mientras va a la deriva, Standish comienza un largo monólogo en el que repasa su vida, las posibilidades que tiene de vivir, la reacción de sus conocidos ante la noticia de su muerte y la fantástica aventura que narrará en el caso de que logre sobrevivir.
La novela, breve, está narrada con un tono amable, un tanto impasible, lo que acrecienta en los lectores la sensación de angustia por la situación que padece el protagonista. Este es quien quizá lleva la situación con más normalidad, aceptando las consecuencias de una experiencia ciertamente extravagante y con la esperanza de que volverán para rescatarle. No hay en su conversación interior espacio para grandes reflexiones existenciales ni religiosas. Mientras intuye que su vida se le escapa, sin solución de continuidad, Standish repasa la placidez de su existencia anterior, ahora truncada.
Nacido en Nueva York, Herbert Clyde Lewis (1909-1950) fue corresponsal de prensa en Shanghái, escritor y guionista en Hollywood. Publicada en 1937, Un caballero a la deriva fue su primera novela.