No es fácil hacer un juego que avise y forme sobre el acoso escolar. Es un tema extremadamente sensible que puede llevar al esquematismo: acosador malo, acosado bueno. Y, aunque en el fondo parte de razón tiene, faltan los matices: ¿por qué un joven decide acosar a otro?; ¿cuál es la respuesta adecuada por parte del acosado: venganza, pasividad? Se podrían escribir libros enteros y siempre sería poco. Por eso, se agradece que un juego abarque, en la medida de lo posible, una temática que preocupa mucho a padres y profesores y que no justifique, sino que explique y dé una posible solución. Pixelopus, creadores de Entwined, proponen Concrete Genie.
Estamos en Denska, ciudad antaño reluciente, hoy sumida en la oscuridad. En ella vive Ash, quien es un joven marginado, que no acaba de encajar, y se refugia en su cuaderno de dibujos para dar rienda suelta a su creatividad. Pero su paz dura poco, cuando unos abusones se enfrentan a él y le rompen su cuaderno. Ash deberá recuperar sus bocetos y, a la vez y con la ayuda de sus dibujos, que cobran vida en las paredes gracias a un pincel mágico, volver a iluminar Denska y lograr que recupere la alegría de antes. El problema es que los abusones no le dejarán en paz si lo ven.
La forma de juego es sencilla y efectiva: llenar de pintura mágica las calles de la ciudad, con nuestra imaginación, para que la oscuridad retroceda. Por el camino iremos entendiendo, tanto a Ash, como el por qué los abusones son como son, y en esto tiene muchísimo que ver una vida llena de dolor bajo una falsa apariencia de seguridad y superioridad. Lo mejor es que el juego nunca juzga, sino que relata para darnos una respuesta que tiende a la positividad. Nadie es bueno o malo porque sí; todo tiene un porqué, aunque no sea justificación, y se debe poder entender para solucionarlo.
Técnicamente se nota que Pixelopus ha contado con presupuesto y medios porque, para ser un juego indie, tiene unos gráficos y sonidos por encima de la media, incluyendo una completa traducción al castellano, marca de Sony, la distribuidora. El añadido de las gafas VR se agradece, dada la belleza en su ejecución, aunque se nos antoja muy limitado: no aporta nada a la historia y es breve, además de que se podría haber dado soporte al DualShock y no obligar a tener dos mandos Move.
Hay otros peros que ponerle al título en sí: se podría haber mejorado la IA de los abusones y añadido un mapa en pantalla que girase con el giro de Ash, pues es agotador tener que consultarlo dándole a pausa. Además, no siempre queda claro qué dibujo hay que hacer para poder avanzar.
En todo caso, Concrete Genie destaca por su estupendo mensaje conciliador y su fabuloso modo artístico de expresarlo. Sin duda, un título a tener en cuenta para padres y educadores que sigan buscando formas positivas de combatir una lacra como el acoso escolar.