Las aventuras gráficas parece que vuelven a estar de moda tras el enorme éxito y la alegría que supuso el regreso de la saga Monkey Island con un juego abrumador. El talento español, apoyado por PS Talents, nos acaba de dar Delirium, un título que hace honor a su nombre: un par de hermanos ven cómo se desata en su casa un auténtico delirio después de que el gato aparezca por arte de magia en el desván, cerrado este a cal y canto.
Una premisa absolutamente surrealista para dar pie a una inacabable sucesión de guiños a cientos de productos: desde Breaking Bad a Rick y Morty pasando por Portal, Metal Gear Solid o Jumanji. Todo ello bajo un funcionamiento de lo más simple: un botón para ir a los sitios, otro para analizar objetos, otro para dialogar con los personajes y otro para volver al centro del escenario en el que estemos en ese momento. Por supuesto, y en consonancia con lo que demanda el propio género, es esencial combinar algunos objetos para lograr el efecto adecuado y resolver contados puzles.
Hay que reconocer que Delirium es divertido y a los que tengan cierta edad les va a sacar muchas sonrisas por todos los guiños, pero llega un momento en que acaban cansando y no aportan gran cosa a una trama muy pobre, que además no se cierra, ya que se anuncia como “Capítulo 1”. Por fortuna, los textos están en español (con errores y alguna que otra palabra innecesariamente subida de tono), aunque no hay voces, seguramente por el escaso presupuesto.
Técnicamente vamos a ver bonitos gráficos cell-shading, es decir, estilo cómic, con bordes bien definidos y agradables a la vista, e incluso algunas animaciones bien hechas. La música, sin ser llamativa, acompaña.
Delirium aprueba como lo que es: una divertida aventura gráfica, pero no acierte a ofrecer una historia consistente, algo que pueden solucionar con un futuro capítulo más trabajado y, tal vez, menos centrado en referirse a todo tipo de obras audiovisuales. Al tener algunos contenidos sensuales (nunca sexuales), se aleja del público más joven, pero los adolescentes lo pueden disfrutar a pesar de su escasa duración.