Llevamos ya varios años analizando los F1 y la conclusión es siempre la misma: el rey de la simulación lo es por varios motivos, entre ellos, tener las licencias de pistas, coches, pilotos, equipos y todo lo que se puede pedir para sentirse dentro de la mítica competición. F1 2019 no es una excepción y volvemos a encontrarnos con lo esperado, además de añadidos muy interesantes.
F1 2019 goza de una conducción tan exigente como nosotros queramos, con ayudas o sin ellas, y este año llega, además, con la F2 también incluida, algo que hay que agradecer. Todo siempre con multitud de vehículos y desafíos, sin olvidar los coches clásicos y un apartado online realmente intenso.
Los poseedores del volante encontrarán una experiencia absolutamente magistral, exigente y muy divertida, que recrea cada sensación al volante real. No solo eso: volvemos a tener daños de coches, meteorología cambiante y desgaste de neumáticos. Por supuesto, esto implica la gestión del monoplaza, tan completa y exhaustiva como siempre, y con explicaciones muy completas.
Técnicamente vuelve a ser implacable, con una fluidez a prueba de balas, música en los menús y un doblaje al español muy aceptable.
¿Qué se puede criticar entonces? La incomprensible manía de Codemasters de seguir prescindiendo del multijugador offline, ausente una vez más y que sigue pesando como una losa; también algunos comportamientos de la IA, demasiado agresivos en ocasiones.
En todo caso, F1 2019 es lo que se esperaba: el rey de la simulación de la competición. No hay nada parecido y los fans vuelven a estar de enhorabuena con un juego lleno de contenido, largo y tan exigente como deseen.