Todos los años reina el fútbol en las consolas gracias a FIFA y PES pero, ¿no hay más deportes? Visual Concepts nos viene a responder a la pregunta con un “sí, por supuesto, y se merecen un tratamiento igual de exquisito”, y por eso cada año se afanan en entregar un NBA 2K que haga que los jugadores se sientan como en la cancha.
Este año se ha mejorado la IA de la máquina y el que espere una buena rapidez de canastas y ser capaz de ganar la espalda al adversario al contraataque, se encontrarán con buenas pérdidas en los bases y escoltas. Y como la filosofía también es “si algo funciona, no lo toques”, se mantienen los modos de juego que tan bien han funcionado antes como Mi Parque, Mi Equipo, etc., los cuales permiten personalizar equipos, partidos, realizar entrenamientos, etc.
Eso sí, hay que citar y destacar el modo Livin’ da Dream, dirigido por Spike Lee, que nos cuenta cómo un joven de instituto realiza una carrera profesional, un añadido interesante y divertido que hubiera sido mejor con una historia algo más profunda.
A nivel técnico se nota que se ha alcanzado el techo de la anterior generación y hay ligeras mejoras, tanto de rostros como de animaciones, pero hay que reconocer que si se quiere ver un auténtico espectáculo, lo mejor es dar el salto a la actual. En todo caso merecen ser destacadas las 40 nuevas horas de locuciones en castellano presentes en ambas generaciones y que aportan frescura y variedad.
NBA 2K16 revalida así su título de mejor simulador de baloncesto: exhaustivo, variado, profundo, personalizable y, sobre todo, muy divertido. Continuista, sí; sin grandes riesgos, es cierto, pero sigue acertando en fondo y forma.