Tras dos estupendos juegos para la Wii, Rabbids Mi Caaasa y Rabbids: Regreso al Pasado, Ubisoft lleva a estos locos animales a la nueva consola de Nintendo, la 3DS, en un juego con todo el sabor de los plataformas de antaño. Y decimos esto porque, aunque se vuelve a recurrir a la máquina del tiempo del segundo título citado, lo cierto es que la variedad de misiones y formas de afrontarlas (vuelos, puzles, etc.) desaparecen completamente para dar paso a muchos niveles pero todos ellos iguales en forma. Son plataformas lineales: hay que ir desde el principio de la pantalla al final en scroll lateral descubriendo los escenarios, sitios ocultos y algún que otro puzle. Todo ello mientras recolectamos ciertos objetos: algunos dan propiedades temporales como la invencibilidad y otros se canjean automáticamente en forma de extras como figuritas e imágenes.
Y en realidad, eso es todo lo que ofrece este Rabbids 3D: niveles y más niveles donde, eso sí, la dificultad va aumentando. Al menos se pueden desbloquear fases un poco variadas donde tendremos que cumplir algunas misiones: encontrar un objeto oculto, derrotar a todos los enemigos sin dejar ninguno, recolectar ítems en el menor tiempo posible, etc., ayudando así a aumentar un poco la rejugabilidad del modo principal si tenemos en cuenta que, además, no hay opción alguna para multijugador.
A nivel técnico cumple, pero no destaca en ningún aspecto. Los fondos son en 3D y están muy cuidados, pero no se usan para nada más que ofrecer profundidad. No se puede interactuar con ellos ni los Rabbids cumplen alguna misión que juegue con el 3D. La música es divertida y variada, y los sonidos que emiten los locos conejos siguen siendo alocados. Por desgracia tampoco aprovecha ninguna otra capacidad técnica de la consola ni similar. Por ello, el público objetivo (el más joven) se entretendrá con él, pero los jugadores exigentes probablemente no encuentren aquí el título que buscan.