Tras la incorporación de Brett Kavanaugh al Tribunal Supremo de Estados Unidos, es creencia general que hay una mayoría de jueces favorables a revocar la sentencia Roe vs Wade, que en 1973 impuso la liberalización del aborto en todo el país. Esto ha llevado a una intensa actividad legislativa en los estados: en unos, para poner a prueba al Supremo con restricciones más severas; en otros, para blindar el derecho al aborto si se deja de reconocer a escala federal.
Antes de Roe, la regulación del aborto estaba básicamente en manos de los estados. Catorce lo habían liberalizado, y la mayoría de los demás lo permitían solo en ciertos casos, como el de peligro para la madre.
Por clara que parezca la mayoría conservadora actual en el Supremo, res…
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