Contrapunto
El ministro de Justicia español, Tomás de la Quadra-Salcedo, ha comentado que la proliferación de denuncias relacionadas con delitos sexuales cometidos contra menores no significa que estos delitos hayan aumentado. Más bien indica el cambio producido en las condiciones sociales, que ahora permiten conocer unos hechos que antes eran ocultados. Si hay más denuncias es por la «ruptura de los tabúes familiares» y por la mayor confianza que los ciudadanos tienen en la policía. La explicación parece dirigida a hacernos creer que el clima social no se ha hecho más turbio sino más transparente. El argumento puede servir para todo. ¿Hay más denuncias por violación? No es que haya más agresiones sexuales, sino que las mujeres han perdido el miedo a denunciarlas. ¿Hay más aprensiones de drogas? No es que haya más droga en circulación, sino que la policía es más eficaz en la persecución de los traficantes. ¿Hay más escándalos de corrupción económica? No más que antes, pero ahora salen a la luz. A este paso, acabarán diciéndonos que no hay más parados que antes: simplemente, se han roto los «tabúes laborales» y ahora la gente ya no tiene que ocultar que no encuentra empleo.
Ignacio Aréchaga