Otto Knoke maneja la computadora con la vista (foto: Microsoft)
La inteligencia artificial (IA) va penetrando en nuestra vida diaria. Ahora, encender la luz del hogar puede hacerse con solo pronunciar una palabra. Tecnologías como esta son especialmente útiles para un sector de la población: las personas con discapacidad.
Uno de los principales beneficios que ha supuesto la IA es facilitar el acceso a la información y a la comunicación en todos los medios y formatos posibles. Cabe destacar que también ha ayudado al personal de salud y asistencial, gracias a la implementación de herramientas que hacen posible una mayor cercanía con pacientes con discapacidad.
Polonia se encuentra en la delantera de este tipo de avance tecnológico con el proyecto llamado Insension, en el cual, a través de la implementación de IA en una guardería, ahora el personal del establecimiento puede comprender más fácilmente aquello que los niños con problemas auditivos, verbales o de movilidad están queriendo comunicarles a través de señales. Mediante vídeos y audios, un sistema de IA analiza cada movimiento, gesto o sonido que los menores realizan y consigue descifrar qué significa.
Así como la IA es empleada para apoyar al personal de salud, también asiste de otras maneras. Gregorio Saravia Méndez, miembro del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), comenta a Aceprensa que “la inteligencia artificial puede llegar a ser utilizada al servicio de personas con discapacidad intelectual, que presenten algún tipo de dificultad en la comprensión de lo que leen. En este sentido, puede combinarse con la lectura fácil y mejorar la accesibilidad a esta de acuerdo con las necesidades concretas de la persona”.
Los gigantes tecnológicos se suman
Así, empresas a la cabeza de la innovación tecnológica buscan mejorar los canales de comunicación disponibles para personas con discapacidad por medio de la IA. Microsoft es una de las Big Tech que se han sumado a proyectos de este tipo a través de Eye Control, un sistema operativo creado en 2018 que hace posible la comunicación para personas con discapacidad verbal: a través de la mirada, el ordenador detecta lo que la persona desea decir y lo representa. Es una especie de teclado que funciona por medio de la vista.
Este programa ya ha sido probado: Microsoft hizo público el caso de Otto Knoke, un guatemalteco que, gracias a la tecnología, pudo continuar trabajando a pesar de la pérdida de algunas facultades. En 1998, Knoke fue diagnosticado con esclerosis lateral amiotrófica –la misma enfermedad del astrofísico Stephen Hawking–, lo que le llevó a perder, primero, el movimiento de brazos y manos, luego el de las piernas, y por último, el habla.
Hay sistemas que reciben órdenes con la mirada para personas que no pueden hablar, o que describen en voz alta a invidentes lo que está a su alrededor
Esto ocasionó que renunciara a su empleo como director ejecutivo de Bancared, una empresa dedicada a la creación de sistemas bancarios y cajeros automáticos en Latinoamérica. Luego de conocer el programa Eye Control, tuvo la oportunidad de volver a trabajar y creó una compañía dedicada al análisis de datos de distintas industrias en Guatemala.
Al igual que Microsoft, Google ha utilizado la IA para crear aplicaciones que mejoren la calidad de vida de personas con discapacidad. Una de ellas es Lookout, la cual ayuda a personas invidentes: por medio de la cámara les describe todo aquello que esté a su alrededor. La empresa de tecnología también ha desarrollado otra aplicación basada en la IA llamada Live Caption, una especie de traductor virtual que da una descripción verbal de las imágenes y lee los mensajes que llegan a los dispositivos de los usuarios.
La más reciente aplicación que presentó Google lleva por nombre Project Relate. Esta busca facilitar la comunicación a personas con dificultades para hablar, pues se ha diseñado para que puedan ser comprendidas por sus aparatos móviles. De esta forma podrán obtener asistencia y redactar mensajes utilizando la voz.
Enhamed Enhamed Mohamed Yahdih, medallista paralímpico invidente español, se ha beneficiado de estos instrumentos tecnológicos desarrollados por Google. En una entrevista con El País mencionó que, por medio de las aplicaciones, ha tenido la oportunidad de conocer mejor el mundo y formarse una idea más concreta de lo que le rodea.
La IA facilita la vida a personas con discapacidad, pero también tiene ciertos retos y riesgos. Uno de ellos se debe a que los sistemas operativos recolectan los datos de los usuarios, y en el caso de las personas con discapacidad, es especialmente necesario salvaguardar la privacidad, pues sus perfiles incluyen información sobre su situación física, lo que podría además exponerlas a discriminaciones.
Un comentario
Ese es el ser humano: a cada problema que se le presenta no cesa de luchar para encontrar soluciones y ayudas. Esa es la esperanza siempre, que el ser humano no se detiene.