La reciente recomendación aprobada por los diputados kenianos para aumentar sus sueldos entre un 25 y un 30% ha provocado la ira de la sociedad civil e incluso comentarios irónicos en la prensa internacional. Esta ha destacado que los parlamentarios kenianos mejor pagados ganarían más que Barack Obama y que muchos líderes parlamentarios europeos.
La subida supondría que los 212 parlamentarios tendrían un salario mensual equivalente a 11.000 euros netos, lo que se aplicaría además con carácter retroactivo desde el inicio de la legislatura en 2008. En un país dominado por la pobreza, un extendido desempleo y hambrunas esporádicas, esta medida de los diputados es un escándalo y revela una avaricia desbocada.
Da la impresión de que los diputado…
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