Médicos, psicólogos y enfermeros al servicio de la CIA y del ejército estadounidense violaron sus normas deontológicas al colaborar en los interrogatorios a prisioneros en los campos habilitados en Afganistán, Iraq y Guantánamo. Es la conclusión de un informe recién publicado por el Institute on Medicine as a Profession (Universidad de Columbia) y la Open Society Foundation (iniciativa del millonario George Soros). Denuncias semejantes habían sido hecho ya por otras organizaciones, como Physicians for Human Rights o el Comité Internacional de la Cruz Roja (cfr. The New York Times, 7-06-2010).
El último informe ha sido elaborado por un comité de médicos, militares y especialistas en bioética, a partir de informaciones públicas, oficiales o a…
Contenido para suscriptores
Suscríbete a Aceprensa o inicia sesión para continuar leyendo el artículo.
Léelo accediendo durante 15 días gratis a Aceprensa.