La imagen de los policías italianos forcejeando con varios inmigrantes africanos para impedir que pasen la frontera hacia Francia, sacude la conciencia del telespectador. Son seres humanos, y es un conjunto de calamidades el que les ha empujado hacia las puertas de Europa. Pero los centros de acogida en Italia están colapsados, mientras la UE se toma su tiempo para resolver la crisis.
Los países industrializados podrían tramitar las peticiones de asilo en los países de tránsito, lo que evitaría mayores penurias a los refugiados y desestimularía a los traficantes
Precisamente sobre el imperativo de adoptar medidas que eviten tener que llegar a estos extremos, trata el informe “Más allá del asilo: repensar las políticas de protección para re…
Contenido para suscriptores
Suscríbete a Aceprensa o inicia sesión para continuar leyendo el artículo.
Léelo accediendo durante 15 días gratis a Aceprensa.