En 1980, tras la invasión soviética de Afganistán, el entrenador de la selección de hockey sobre hielo de Estados Unidos llevó a un grupo de jóvenes universitarios a los Juegos Olímpicos de Invierno para enfrentarse a la todopoderosa selección de la Unión Soviética. Había una diferencia enorme entre ambas selecciones, pero la de Estados Unidos sentía la presión de la Guerra Fría.
El milagro es la típica película de superación deportiva, pero bien narrada y con puntos de interés. Aunque no faltan los toques de corneta nacionalistas y un poco patrioteros, la película tiene el sabor de un Master and Commander a lo deportivo, con un jefe implacable que lleva a sus chicos a una meta casi imposible. El ayudante del entrenador y el médico compensarán la dureza del jefe con su más tierna humanidad. No falta la trama matrimonial del entrenador, con una excelente Patricia Clarkson en el papel de esposa fuerte y sacrificada.
La película está dirigida por Gavin O’Connor, que se hizo famoso en el Festival de Sundance por Tumbleweeds. Nos habla de la superación del individualismo en aras de la comunidad, y lo extrapola a la nación estadounidense en un momento de crisis. En fin, cine para toda la familia, y menos superficial de lo que parece.