Beirut. Desde que se estrechó el filtro para la entrada de estudiantes árabes en EE.UU. tras los atentados del 11 de septiembre de 2001, los estudiantes árabes han buscado otros destinos en el extranjero. Y esto se ha notado en un incremento de su presencia en el Líbano.
¿Qué facilidades les ofrecen las universidades libanesas? Una cultura oriental familiar, el idioma árabe, compartido con el inglés o francés, y un título que será reconocido en universidades americanas o europeas. Aun siendo privadas casi todas las universidades, y muchas de ellas muy caras, es un primer paso necesario para lograr un puesto de trabajo en Europa, América o en los ricos países del Golfo Pérsico. A su vez, la población de estos países va adquiriendo mayor nivel educativo, y trasladarse al Líbano puede suponer un paso intermedio entre las culturas orientales y occidentales.
La Universidad Americana, multiconfesional
Esta posición fue prevista ya en 1863 por el americano Daniel Bliss, al fundar el Colegio Protestante Sirio (durante la ocupación turca el Líbano era considerado parte de Siria). Años más tarde, en 1920, daría lugar al campus de la Universidad Americana de Beirut (www.aub.edu.lb). Mas de cuarenta mil estudiantes han pasado por sus aulas, y entre sus glorias se encuentran redactores de la Carta de los derechos del hombre de las Naciones Unidas, investigadores y profesores asociados en universidades como Harvard, MIT, Duke, Nueva York, arquitectos de renombre internacional, y un largo etcétera.
Además se ha convertido en un enclave de convivencia multiconfesional. En sus aulas pueden verse alumnas con velo, palestinos, saudíes, iraquíes y libaneses de diferentes confesiones y convicciones políticas, lo que permite vivir una gran experiencia de apertura y tolerancia. La Universidad Americana de Beirut es considerada la tercera universidad de Oriente Medio, después de la Universidad del Rey Fahd en Petróleo y Minerales (Arabia Saudita) y la Universidad de Teherán (Irán).
Para distintas comunidades
El abanico de posibilidades académicas es muy amplio. La presencia de diferentes órdenes religiosas y la lógica evolución de la sociedad impulsaron la educación. La actual Universidad Balamand (www.balamand.edu.lb) era una abadía cisterciense construida en 1175, que pasaría a la Iglesia ortodoxa en 1289, llegando a ser un importante punto de referencia teológico, y de trascripción de manuscritos para otros monasterios de la región.
Desde 1988, bajo el impulso del patriarca greco-ortodoxo de Antioquía, el Instituto Teológico ha sido complementado con otras facultades universitarias, para atender las necesidades de la población libanesa, de Oriente Medio e incluso de la diáspora ortodoxa del mundo entero. Artes y ciencias sociales, ingeniería, estudios empresariales, medicina, así como diseño gráfico, gestión hotelera y turismo forman parte ahora de las opciones, impartidas tanto en inglés como en árabe, lo cual atrae a estudiantes de la vecina Siria.
La misión de Siria, llevada a cabo por los jesuitas, dio numerosos frutos, entre los que se cuenta la Universidad San José de Beirut (www.usj.edu.lb). Creada en 1869, posee un gran prestigio en el mundo francófono. Sus estudiantes son bien recibidos en Francia y Canadá, y obtienen plaza en los mejores centros educativos de esos países. La educación se imparte en francés. Es conocido su método de enseñanza del árabe clásico. Dentro de sus facultades se han formado generaciones de periodistas, políticos, ingenieros y empresarios que han llevado progreso y desarrollo a los países de Oriente Medio.
Las universidades son, también aquí, importantes focos de cultura y vehículos de ideas. Cada comunidad confesional lo reconoce y las defiende como tales. La Universidad de los Armenios (www.haigazian.edu.lb), un pequeño campus en Beirut, anglófono, que cofinancia la diáspora armenia en América, es una de las más relevantes. Los maronitas disponen de la Universidad del Espíritu Santo en Kaslik (www.usek.edu.lb). La Universidad de Notre Dame (www.ndu.edu.lb) y la Universidad de la Sagesse imparten sus estudios tanto en inglés como en francés y en ellas estudian alumnos de todas las confesiones, ya que los colegios maronitas se encuentran por toda la geografía del país. La Universidad Árabe de Beirut (www.bau.edu.lb) (1960) fue financiada por el antiguo presidente de Egipto, Gamal Abd El Nasser; se encuentra afiliada académicamente a la Universidad de Alejandría, y se dice al servicio de la nación libanesa en el contexto de la gran nación árabe.
Estatal y gratuita
Otras iniciativas son más recientes y van dirigidas a la emergente clase chiita. Al Iman Al Ouzai, Al Islah, Al Manar son universidades que garantizan estudios islámicos para una juventud que está aprendiendo a insertarse en la aldea global.
Más reciente es la Universidad Libanesa, estatal (www.ul.edu.lb). Se creó en 1950, en un esfuerzo por sobrepasar las divisiones confesionales; y supuso la continuidad de la enseñanza pública obligatoria a nivel nacional. El Líbano cuenta con un nivel de alfabetización de 97,5% y se hace necesaria la presencia de un campus público asegurado por los fondos del Estado. Hasta 1975 la Universidad sirvió de elemento centralizador de políticas de enseñanza nacionales, y de motor de desarrollo sanitario en la región. Pero, como muchas instituciones en el país, los largos años de guerra dispersaron su claustro, sus facultades y sobre todo, agostaron la financiación gubernamental.
Hoy en día el esfuerzo por redorar su antiguo blasón es visto con respeto por los libaneses, ya que es la única universidad gratuita del país. Aunque el idioma oficial de enseñanza es el árabe, los exámenes se pueden presentar en inglés y francés. Actualmente forma parte del proyecto Avicena que la Unión Europea ha financiado, buscando aunar a diferentes universidades europeas y mediterráneas a través de la enseñanza a distancia.