Entre los requisitos que el editor Kurt Wolf apunta para dedicarse a este oficio destaca los siguientes: “capacidad de distinguir entre lo auténtico y lo que carece de autenticidad, lo original y la imitación, así como cierto olfato y sensibilidad para captar las tendencias esenciales y progresivas de su tiempo”.
En las editoriales que dirigió, tanto en Alemania como en Estados Unidos, Wolf (1887-1963) intentó ser coherente con esta manera de entender una profesión que a lo largo del siglo XX sufrirá radicales cambios que afectan a la estructura de la industria editorial y al concepto mismo de editor, algo que ya intuye Wolf: “Uno edita o bien los libros que considera que la gente debería leer, o bien los libros que piensa que la gente qu…
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