La derecha posliberal quiere sustituir los principios y las reglas de juego del liberalismo por una visión del orden social y político ordenada al bien común. ¿En qué propuestas concretas se traduce esto? Segundo artículo de una serie sobre la nueva relación de los conservadores con el Estado.
El término “intervencionismo” sigue siendo demasiado fuerte para la derecha estadounidense, tan reacia a que los poderes públicos –del gobierno federal para abajo– suplanten la iniciativa ciudadana. Pero lo cierto es que los llamamientos a poner el poder del Estado al servicio de fines conservadores se repiten entre los pensadores más representativos del posliberalismo o “conservadurismo del bien común”: Patrick J. Deneen, Gladden Pappin, Adrian Verme…
Contenido para suscriptores
Suscríbete a Aceprensa o inicia sesión para continuar leyendo el artículo.
Léelo accediendo durante 15 días gratis a Aceprensa.