El duelo entre los dos candidatos a la Casa Blanca, un republicano atípico y una demócrata bendecida por el “establishment” de su partido, no solo es entre dos estilos de hacer política: también se enfrentan dos maneras de ver el mundo. Las claras diferencias entre sus programas constatan la insana polarización de la que se lleva hablando años en el país.
El programa de Hillary Clinton para estas elecciones representa la continuidad con Barack Obama. Pero la veterana demócrata es más realista: no ofrece un proyecto de cambio al estilo del “Yes, we can!”, ni aspira hacer una “revolución” como la que prometió su rival en las primarias, Bernie Sanders. Su objetivo es lograr que el s…
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