Durante seis años el cheque escolar en Florida ha sido una ayuda para que los padres descontentos con la escuela pública puedan llevar a sus hijos a escuelas privadas. Sin embargo, el Tribunal Supremo de Florida ha estimado en una sentencia a comienzos de este año que el cheque escolar es contrario a la Constitución de este estado.
Hasta ahora, las ayudas del estado de Florida han sido de dos tipos. Unas, a las que se refiere la sentencia, son ayudas a las que optan los padres que tienen hijos en escuelas públicas «suspendidas» por los inspectores al menos dos veces en un período de cuatro años, por su insuficiente calidad de enseñanza. Las segundas son ayudas para padres con hijos discapacitados que no están conformes con el progreso de su hijo en la escuela asignada por el estado. En ambos casos, el estado ayudaba económicamente a los padres para que pudieran elegir el centro educativo para su hijo, aunque fuera privado.
Por 5 contra 2, los jueces han considerado que es inconstitucional «desviar dinero público hacia sistemas privados separados, paralelos y en competencia con las escuelas públicas libres, que no están sujetos a los requisitos de uniformidad del sistema escolar público».
El fallo del Tribunal afectará a 700 estudiantes que actualmente se benefician de los cheques escolares. Para el gobernador republicano Jeb Bush, esta sentencia «niega a cientos de padres la oportunidad de enviar a sus hijos a la escuela que ellos crean mejor para el éxito de los niños». El gobernador no descarta interponer acciones legales para recuperar el cheque escolar en Florida.