Breves notas sobre algunas películas que se estrenan el 24 de octubre.
Drácula. La leyenda jamás contada (Dracula Untold)
Director: Gary Shore
Intérpretes: Luke Evans, Samantha Barks, Dominic Cooper, Charlie Cox, Sarah Gadon, Zach McGowan, Art Parkinson, Diarmaid Murtagh, J.J. Murphy.
92 min.
Adultos. (V)
En 1462, Transilvania es un reino vasallo del imperio otomano. El príncipe Vlad decide rebelarse, y para defender a su pueblo y a su familia, tendrá que hacer un trato espantoso con una criatura terrible. Vlad el empalador es un personaje histórico bien documentado, un héroe en Rumanía, terror de los turcos. En 1897, el irlandés Bram Stoker unió el mito de los vampiros a este personaje, y lo convirtió en icono popular del terror. En 1992, el Drácula de Francis Ford Coppola recordaba por primera vez al Vlad real. La nueva versión va más lejos y lo convierte en un superhéroe, el prototipo de caballero cristiano, defensor del débil y perfecto padre y marido.
Gary Shore ha realizado una película de acción –más de suspense que de terror– basada en un buen equipo de efectos especiales, con grandes combates –no excesivamente sangrientos–, ingeniosas transformaciones, y una exhibición de los poderes adquiridos por el príncipe Vlad, que lo convierten en una máquina de combate. Fernando Gil-Delgado.
El juez (The Judge)
Director: David Dobkin
Intérpretes: Robert Downey Jr., Robert Duvall, Vera Farmiga, Billy Bob Thornton, Leighton Meester, Vincent D’Onofrio, Jeremy Strong, Sarah Lancaster.
141 min.
Jóvenes. (VSD)
Hank Palmer es un prepotente abogado neoyorquino que se verá en la tesitura de defender a su padre, un honorable juez, acusado de asesinato.
El problema de este thriller es que el guion de Nick Schenk (Gran Torino) y el debutante Bill Dubuque no está a la altura del rico material narrativo y dramático que desarrolla; o bien ha sido cercenado y desmenuzado en el montaje final del filme. Lo cierto es que el relato se alarga demasiado, tal vez por un exceso de tramas (algunas de ellas desarrolladas a brochazos). Estos defectos rebajan la calidad de El juez, que de todas formas es una interesante película dramática para un público amplio. Jerónimo José Martín.