Barcelona.— Internet y las redes sociales han abierto nuevas avenidas a la comunicación, e inevitablemente, al delito. Por eso ya hay fiscales especializados en cibercrimen, como Daniela Dupuy, que ejerce tal función en Buenos Aires. Con sus siete años de experiencia, tiene una advertencia para el público: la mayoría de esos delitos son sexuales, y se cometen gracias, en parte, a que las propias víctimas facilitan datos sensibles que suben a la red.
Daniela Dupuy es, además de fiscal en la capital argentina, profesora del Máster Universitario en Ciberdelincuencia de la Universitat Internacional de Catalunya (UIC Barcelona). En una estancia aquí para impartir sus clases tuvimos ocasión de conversar con ella.
En estos días ha causado conmoció…
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