Una buena causa, como la lucha contra el racismo, salida de madre, puede convertirse en fundamentalismo puro y acabar volviéndose en contra de las libertades de aquellos a quienes pretende defender.
Más que “Sueño de chocolate”, para la panadería alemana Raddatz, su nuevo anuncio de pastelillos así denominados se ha convertido en una auténtica pesadilla. De la noche a la mañana se ha desatado un aluvión de protestas, acusaciones de pedófilos y racistas y ataques a los establecimientos de la cadena. Y todo porque la publicidad de los dulces viene acompañada de la fotografía de un bebé de color (de color negro, se entiende), que lleva por ropaje un pañal blanco como la banda de vainilla del pastel.
Los responsables de la marca …
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