Muchas mujeres quieren seguir siendo madres sin renunciar a desarrollarse profesionalmente. Ellas ven una cierta evolución en la sociedad, en el mundo empresarial y en los roles familiares; las leyes prohíben la discriminación y protegen a las mujeres que dan a luz. Pero, ¿cuál es la situación real?
Cuando empecé mi carrera, mi abuela me llegó a decir que no entendía que ahora la mujer trabajara porque, ¿qué iba a pasar cuando tuviera hijos?”. Eva Serna (24 años, consultora del sector aeronáutico, soltera y sin hijos) lleva pocos años trabajando y tiene una visión positiva del futuro cercano. Además, es consciente de las diferencias generacionales: “Ella [su abuela] es una mujer mayor que ha dedicado su vida a su familia y que no entiende q…
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