La concesión del Premio Nobel de la Paz a Liu Xiaobo es una oportunidad para recordar la Carta 08, en la que junto con más de trescientos intelectuales chinos pidió en diciembre de 2008 el respeto de los derechos humanos y de una verdadera democracia liberal en China. Detenido por su papel protagonista en la redacción de la Carta 08, fue condenado a 11 años de prisión.