¿Qué pueden aportar los intelectuales y los comunicadores a una sociedad en la que determinadas ideas están mal vistas? ¿Basta desatar la lengua contra los censores de turno, sin preocuparse de decir nada valioso? Frente al rugido de los indignados de todos los partidos, el regreso a la moderación y a la actitud reflexiva se presenta como un paso necesario para suavizar los conflictos.
En una de sus largas entrevistas a Benedicto XVI (Luz del mundo, 2010), el periodista Peter Seewald le hizo notar la predicción de Aldous Huxley en la novela Un mundo feliz: la ausencia de verdad llegaría a ser el rasgo más destacado de la sociedad moderna. La referencia dio pie al Papa para hablar sobre uno de sus temas favoritos: la “dictadura del relativis…
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